miércoles, 31 de diciembre de 2014

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE UNA AUTOESTIMA ALTA DENTRO DE LAS RELACIONES BDSM?



En el tiempo que llevo explorando y conociendo este maravilloso mundo me he encontrado con la creencia un poco frecuente de las personas que se van introduciendo, que el rol sumiso tiende a tener una autoestima baja y que toman el rol como tabla de salvación, así que ese tipo de ideas me dio en qué pensar, pues ya que he adoptado este rol y no me considero una persona con una autoestima baja, así que me di a la tarea de investigar un poco y exponer el por qué considero que es importante contar con una alta autoestima dentro de la sumisión BDSM.

Comenzaré por compartir las definiciones que considero importantes para establecer el tema como son: autoestima, autoestima baja y sumisión.

Autoestima. Significa valoración de sí mismo, la cual puede ser alto o baja en diferentes casos y aspectos.

  Uno de los problemas psicológicos más importantes en México y otros países similares es la gran cantidad de personas con baja autoestima. Esta situación les hace padecer inseguridad, nerviosismo, torpeza, preocupaciones exageradas, poca o nula iniciativa, envidia, celos, conflictos con los demás, hasta problemas de salud física derivados de los elementos anteriores.

Autoestima colectiva y autoestima personal. Uno de los elemntos que influyen más en la forma en cómo cada quien se percibe es la sensación  de pertenencia a grupos, instituciones o clases sociales respecto a los cuales tiene un determinado sentimiento ya sea de admiración o desprecio. Quien se siente perteneciente a un grupo, institución o clase que valora mucho se siente orgulloso de si mismo, mientras que se autodesprecia quien se siente parte de una colectividad devaluada. La pareja, la familia, el equipo, el centro de trabajo, la comunidad, el país y la humanidad son entidades colectivas cuya valoración o desvaloración afectará, para bien o para mal, a la autoestima de sus miembros.

  Una persona que se aleja o se aísla durante períodos prolongados se desorienta respecto a sí mismo y la vida va perdiendo sentido.

  La sensación de amar y ser amado, la integración afectiva, es algo básico para que cada quien se ame a sí mismo y tenga  una elevada autoestima, para que le encuentre sentido a sus esfuerzos y gustos a la vida.

  Los sentimientos que se presentan en las personas con una autoestima elevada son los siguientes:

- Sentirse útil
- Sentirse importante
- Sentirse inteligente
- Sentirse bello
- Sentirse fuerte
- Sentirse sano
- Sentirse admirado
- Sentirse querido
- Sentirse valiente
- Sentirse audaz
- Sentirse atractivo
- Sentirse aceptado
- Sentirse ingenioso
- Sentirse creativo
- Sentirse productivo
- Sentirse cómodo
- Sentirse tranquilo
- Sentirse diferente
- Sentirse exitoso
- Sentirse perseverante
- Sentirse orgulloso
- Sentirse hábil
- Sentirse necesario
- Sentirse sensual
- Sentirse sabio
- Sentirse afortunado
- Sentirse poderoso
- Sentirse dueño de sí mismo

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  Estos sentimientos pueden presentarse en algunas áreas de actividad y no en otras.

  Cuanto mayores sean estos sentimientos y más áreas abarquen mayor será la autovaloración de la persona. Por el contrario, si no se presentan o se presentan con poca intensidad, la autoestima es baja.
En algunos casos la autoestima se vuelve fanática y la persona se adora a sí misma. Esta patología psicológica generalmente representa una sobrecompensación que en realidad encubre una baja autoestima. La persona se aferra a sentirse más que como antes de un cambio brusco en las relaciones afectivas que aparecían estables. Es una especie de venganza contra aquellos que repentinamente le devaluaron después de que supuestamente le valoraban mucho. También puede generase por el temor a perder la valoración a la que se está acostumbrado. Esto conlleva estrés y sufrimiento de dicha persona y de quienes le rodean derivando en dramáticas situaciones conforme la realidad externa se impone a la fantasía ególatra. Y lo que es peor: que la falta de objetividad en sus auténticas posibilidades pueden llevarle a situarse en un nivel de autoexigencia o realización para el que no está capacitado, con el consiguiente fracaso, lo que fácilmente puede inclinarlo al otro extremo: considerarse una persona inútil y nada valiosa (algo muy frecuente en este tipo de personalidades inestables).

La Baja autoestima se define como la dificultad que tiene la persona para sentirse valiosa en lo profundo de sí misma, y por tanto digna de ser amada por los demás.

Las personas con Autoestima Baja buscan, a veces sin ser muy conscientes de ello, la aprobación y el reconocimiento de los demás y suelen tener dificultad para ser ellas mismas y poder expresar con libertad aquello que piensan, sienten y necesitan en sus relaciones interpersonales, así como para poder decir “no” al otro sin sentirse mal por ello.

En ocasiones las personas que esconden en su interior sentimientos de Baja Autoestima, suelen ocultárselos a sí mismas mediante el uso de diferentes  mecanismos de defensa, (negación, intelectualización, fantasía, etcétera) incluso haber creado a su alrededor una coraza defensiva, para protegerse de la amenaza (a menudo fantaseada) frente a posibles rechazos sociales, incluso a críticas personales u opiniones que cuestionen sus creencias.

Las personas con Baja Autoestima suelen experimentar ansiedad ante situaciones de intimidad y afectivas. Esto de debe a la dificultad que experimentan a la hora de sentirse seguras y espontáneas en sus relaciones interpersonales.

  SUMISION. La palabra sumisión proviene etimológicamente del latín submissionis que hace referencia a la condición del sumiso o sometido. El vocablo está integrado por el prefijo "sub" = debajo y por "missus" = "mandado". La sumisión implica que alguien está bajo el poder de otro al que le debe obediencia incondicional.

SUMISION BDSM. Es cierto que las sumisas debemos obediencia a nuestro Amo, más no es una obediencia ciega, tonta, sin bases ni fundamentos, para llegar a este punto nosotros hemos pactado ya las reglas con las que nos conduciremos, ambas partes sabemos qué podemos o no hacer, la mayoría de nosotros, procuramos marcar en la play list todo aquello que nos gusta o no y en qué grado, hablamos mucho sobre cómo serán las cosas, en qué momentos estaremos dentro de rol y fuera de él, evaluamos continuamente la relación y mantenemos una vía de comunicación abierta así como la posibilidad de modificar las condiciones si algo no marcha bien.

  La palabra sumisión, generalmente tiene una connotación negativa pues marca una posición de inferioridad, de personas sin autoestima, es por ello que me he dado a la tarea de realizar este pequeño texto, definiendo cada término y dando una conclusión personal.
Entonces ¿por qué es importante tener una autoestima alta dentro de las relaciones BDSM?
Primero que nada, porque si no te respetas no lo hará nadie más por ti, es fácil toparnos a cada momento con pseudo Amos, (también hay pseudo sumisas, pero ese será otro tema), que buscan personas vulnerables para hacerse sus pajas mentales, así que bien, el hecho de que a nuestro Dominantes les plazca llamarnos de cierta forma (puta, perra, zorra, golfa) no quiere decir que nosotras lo tomemos tal cual, no en el contexto ofensivo, a mí, en lo particular, mi Tutor me explicó que es bueno para la relación D/s que nos esforzáramos en ser las putas de nuestros Amos, pero no en el contexto de retribución  económica, sino en el de que debo liberarme de mis complejos absurdos y así disfrutar mi sexualidad sin miedo ni represiones, es decir, soy puta en el sentido sexual, no en el ofensivo. Así pues, no permito que cualquiera venga y me espete en la cara dicho mote, ni ese ni otro, ha sido un paso que aunque ya lo había manejado con mi Tutor con Mi Señor actual lo he hablado y hasta que no he aceptado que se me llame así lo ha respetado.
 Así también, una autoestima baja no te permitirá sentirte a gusto en ningún momento, siempre te sentirás inferior y poca cosa, aquí se trata de disfrutar ambas partes, es cierto que debemos como rol sumiso estar pendientes de la satisfacción de nuestro Amo o Señor y ello se logra porque como ya lo he dicho, hemos pactado lo que se permite o no y el rol Dominante se moverá en esos términos para lograrlo, el hecho de que adoptemos posturas, posiciones o protocolos no nos hace menos, yo, he decidido establecer mi lado sumiso porque gozo de la exigencia, procuro siempre ser mejor en todo, un poco de soberbia, lo sé, pero es por eso que me gusta este rol, porque a quien he elegido como Mi Señor ve en mí el potencial que tengo y me ayuda a superarme sin pretextos, sin excusas, estoy para ser mejor, quiero serlo y voy a serlo.
 Es importante que si bien no sabes lo que quieres tengas muy claro lo que NO quieres y lo que estás dispuesto a experimentar, no se trata de ir diciendo Sí a todo, habrá límites duros o inquebrantables y habrá otros flexibles, en los que decides que por el momento no, pero que existe la posibilidad de que más adelante lo intentes, intentar no es sinónimo de aceptar, si no es de tu agrado no y punto.
  Con una baja autoestima aunque sepas qué es lo que te gusta o no, jamás lo dirás por miedo al rechazo, al qué me dirá, al abandono y con esto, lo único que vas a lograr es sentirte mal porque no lo vas a disfrutar y por lo tanto el lado Dominante tampoco lo hará porque en tu actitud se refleja, lograrás tener una pésima experiencia porque no estás cómoda ni a gusto y si te involucras con un pseudo amo entrarás en una relación destructiva de la que difícilmente saldrás pues las personas con baja autoestima suelen crear una dependencia con aquello que las afecta.
  Para sentirme sumisa, debo tener los sentimientos de autoestima que menciona el texto, de lo contrario sólo seré un ser más, sin un propósito, sin un objetivo, no me llenará nada ni me sentiré feliz al realizar mi entrega, me gusta sentirme y saberme querida y deseada.
  Desde que asumí mi rol sumiso nunca me he sentido denigrada, devaluada ni mucho menos, muy al contrario, Mi Señor se ha ocupado de hacerme saber que soy como su tesoro (así me lo ha dicho él) el cual debe cuidar y proteger, me hace sentir plena, feliz, dichosa, es cierto que cuando fallo hay un castigo y eso es lo que me duele, saber que he hecho algo mal y que lo corregirá de una u otra forma y no será tan agradable, pero siempre he agradecido el castigo porque es muestra de su preocupación por mí, por mi superación.
  Al principio de la relación, cuando nos empezamos a conocer le pedí que no me dijera ningún tipo de halago, nunca me han gustado, y lo respetó, cuando decidimos empezar una relación D/s habló conmigo y me dijo que ese era un punto que quería cambiar, pues si estaba dispuesta a aceptar las humillaciones y los insultos (cosas que viniendo de Mi Señor me excitan bastante), también debía aceptar los halagos, ahora lo leo y me causa risa, porque por lo regular es al revés, primero aceptas los halagos y cuesta más un insulto o una humillación, creo que es de las cosas que más me ha costado aceptar, cada vez que me dice que le gusta cómo luzco o que le ha gustado algo que he hecho, se me hace un nudito en el estómago que me hace cierto malestar pero lo he ido asimilando, creo que empieza a gustarme, alguien me dijo que el hecho de que no aceptara los halagos era síntoma de una baja autoestima, a mí, no me gustan porque me hacen estar en un estado de confort que no me permite lograr mis expectativas, en fin, poco a poco es algo que estoy aprendiendo a manejar.
 Y el punto más importante, si no estás consciente de cuánto vales ¿cómo esperas saber quién te merece?, no somos monedas de cambio que se dan a la primera, debes entender que estás poniendo en manos de otro ser el tuyo, que si no sabes valorarte te expones a recibir experiencias que no te dejarán satisfecho, que en vez de crecer te hundirás en tu propia lástima y en tu necesidad de intentar ser reconocida, así que antes de iniciar una relación, ya sea BDSM o vainilla, primero evalúa la relación que llevas contigo, fíjate qué tanto te conoces, qué tanto te valoras, cómo te sientes al estar en soledad, ¿lo disfrutas, puedes estarlo sin desesperarte?, sabes qué te gusta, qué no, cómo te has sentido, ¿sabes decir NO sin sentirte culpable?, ¿te has puesto a pensar en cómo tomarías alguno de los motes que Tu señor decida darte, cómo reaccionarás ante una humillación pública o privada si lo has aceptado?, ¿cómo te sentirás ante eso?, una autoevaluación siempre es buena antes de comenzar cualquier relación, así que antes de tomar una decisión, tómate el tiempo necesario para saber qué es lo que buscas, así te evitarás tragos amargos.

  Espero que este texto haya sido de ayuda para saber por qué es importante una autoestima alta dentro del BDSM. Dejo el link de las páginas en las que me he apoyado para realizar este texto.

 


domingo, 28 de diciembre de 2014

CARTA A MI TUTOR.

Querido Tutor.

  Sé que ya ha pasado algún tiempo desde nuestro último mensaje y las razones son más que evidentes, por fin he aceptado a un nuevo Amo, sin embargo no quería dejar esta relación así. Me he decidido por su compatriota, aún no hemos podido sesionar porque estamos esperando los resultados de laboratorio , como Vd. mismo me enseñó: el que antes de comenzar una relación es sensato que ambos pasemos por un análisis de E.T.S (Enfermedades de Transmisión Sexual).

  Ante todo quiero agradecerle infinitamente la paciencia y dedicación que me ha mostrado porque hoy, gracias a usted comienzo a dar mis primeros pasos como sumisa en tiempo real, porque sin su apoyo ya habría cometido algunas tonterías de las que seguramente me habría arrepentido y me habrían hecho alejarme de este mundo.
  
 Sé que sonará extremadamente cursi, pero al escribir estas palabras, me saltan las lágrimas a los ojos y siento ese nudo en la garganta que se me hace cada vez que he de concluir con algo hermoso, gracias Mi Señor, por ayudarme a crecer como persona, como mujer, por crearme como sumisa y por alentarme a ser Dómina, en conclusión, por confiar en mí, en esta, que por un tiempo ha sido su humilde perra, que anhela algún día poder agradecer en persona todo su esfuerzo, jamás creí poder encariñarme tanto con alguien a quien traté con tanta distancia de por medio y que a pesar de  esa distancia se ganó mi respeto, admiración, devoción, cariño y sobre todo: confianza.

  Mi Señor, ojalá que su luz siga guiando a más novatas como yo, porque con una guía tan firme y sólida el BDSM se fortalece, así como Vd. me ha fortalecido a mí, gracias por todas sus atenciones recuperé confianza en mí, me acepté como soy y lo que soy, que he fallado muchas veces y que lo seguiré haciendo, es cierto, pero siempre tendré tatuada en el alma su sello de Dominio, ahora Vd. forma parte de mí, sé que no soy más que otra que usted ha formado y que seguirá formando, que tal vez mañana se olvide de natalia, pero tenga por seguro que natalia nunca se olvidará de el Señor El Faro.

  En algún momento me había dicho que pronto volaría sola y en ese momento le pedí que por favor no me soltara aún, ahora, me siento segura de hacerlo, feliz de poder intentarlo y orgullosa de saber que lo que soy lo ha hecho su mano, haré todo lo posible para demostrar que fui digna de estar bajo su tutela y dentro de la medida de lo posible pondré su nick en alto. Mi Señor, las despedidas en verdad que no son lo mío, así que no diré adiós porque le he prometido que le seguiré enviando mis textos para que por favor me dé su opinión, en el blog usted sigue y seguirá siendo colaborador, así que puede acceder cuantas veces desee.

  Me habría gustado, en algún momento poder sesionar en persona con Vd. pero estoy tranquila y feliz de saber que cuenta con una persona maravillosa a su lado.

  En verdad creo que nunca sabrá qué tan orgullosa se siente esta perra de haber logrado que en algún momento Vd. me llamara su puta, su zorra, su perra masoquista........ su sumisa. ¡Qué honor poder decir y saber que Vd. me ha considerado como tal!

  Gracias nuevamente por hacerme despertar tantas cosas, por hacerme ver qué tan alejada estaba de mí, por miedo, por inseguridad, por falsos moralismos, por complejos estúpidos.

  Las palabras no podrán describir el mar de emociones que experimento y sé que Vd. merece mucho más que un simple texto, pero por favor, reciba cada palabra como muestra de humildad ante Vd.

  En verdad espero haber logrado que en algún momento Vd. se sintiera tan a gusto con mi sumisión como yo lo he estado con su Dominio, no lo podré olvidar.

  A sus pies, besando sus manos en muestra de agradecimiento, con las lágrimas en los ojos.
natalia.

  

  


sábado, 1 de noviembre de 2014

BDSM vs. VIOLENCIA.


  Me he encontrado con que muchas personas catalogan al BDSM y a las personas que lo practicamos como violentos y es por eso que sin hacer mucho trabajo de investigación y recurriendo a las páginas convencionales a las que recurrimos en el medio cibernético he tomado las definiciones de BDSM y de violencia de la página de Wikipedia para poder realizar una clara diferencia entre una y otra:

  La violencia es el tipo de interacción humana que se manifiesta en aquellas conductas o situaciones que, de forma deliberada, aprendida o imitada, provocan o amenazan con hacer daño o sometimiento grave (físico, sexual, verbal o psicológico) a un individuo o a una colectividad; o los afectan de tal manera que limitan sus potencialidades presentes o las futuras. Puede producirse a través de acciones y lenguajes, pero también de silencios e inacciones.

  Es desctacable también el daño (en forma de desconfianza o miedo) sobre el que se construyen las relaciones interpersonales, pues está en el origen de los problemas en las relaciones grupales, bajo formas como polarización, el resentimiento, el odio, etc., que, a su vez, perjudica las redes sociales y de comunidad. La violencia puede manifestarse también como una amenaza sostenida y duradera, causante de daños psicológicos quienes la padecen y con repercusiones negativas en la sociedad.

  Es un comportamiento deliberado, que provoca, o puede provocar, daños físicos o psicológicos a otros seres, y se asocia, aunque no necesariamente, con la agresión física, ya que también puede ser psicológica, emocional o política, a través de amenazas, ofensas o acciones.

  Por norma general, se considera violenta a la persona irrazonable, que se niega a dialogar y se obstina en actuar pese a quien pese, y caiga quien caiga. Suele ser de carácter dominantemente egoísta, sin ningún ejercicio de la empatía. Todo lo que viola lo razonable es susceptible de ser catalogado como violento si se impone por la fuerza.

  El trastorno de personalidad antisocial es una condición psiquiátrica que causa un patrón en curso de manipular a otras personas y violar sus derechos. Las personas con este trastorno no siguen las normas de la sociedad y con frecuencia rompen la ley. Es característico que las personas con este diagnóstico sean completamente indiferentes a los sentimientos y al dolor ajenos, y que muestren un patrón profundo de falta de remordimientos junto con decisiones irresponsables.
Síntomas 
Síntomas comunes de trastorno de personalidad antisocial incluyen:

·         Romper la ley repetidamente
·         Falsedad, mentir repetidamente
·         Impulsividad (p. ej., imposibilidad de planificar con antelación)
·         Irritabilidad y agresividad (p. ej., peleas físicas repetidas)
·         Indiferencia por la seguridad de sí mismo y de otras personas
·         Irresponsabilidad (p. ej., con respecto al trabajo, la familia, las finanzas)
·         Falta de culpa sobre lastimar a otras personas
·         Incapacidad de sentir simpatía o empatía por otras personas
·         Falta de preocupación por consecuencias de acciones/comportamiento
·       Incapacidad de aprender por experiencia, modificar comportamiento con base en resultados pasados o resultados futuros predichos
·         Intimidación o crueldad hacia animales y/u otros humanos
·         Destrucción de propiedad

  Las personas con trastorno de la personalidad antisocial suelen presentar trastornos por abuso de drogas y problemas legales y, a veces, presentan trastornos de depresión , ansiedad o déficit de atención con hiperactividad .

  BDSM es un término creado para abarcar un grupo de prácticas y fantasías eróticas. Se trata de una sigla formada con las iniciales de las siguientes palabras: Bondage; Disciplina y Dominación; Sumisión y Sadismo; y Masoquismo. Abarca, por tanto, a una serie de prácticas y aficiones sexuales relacionadas entre sí y vinculadas a lo que se denomina sexualidades no convencionales o alternativas.

  A veces, en el habla cotidiana, se utilizan las expresiones "sado" o "sadomasoquismo" para referirse al BDSM, aunque ambos términos resultan equívocos, en parte por tratarse de palabras creadas por la psiquiatría para definir enfermedades mentales y en parte, porque las prácticas abarcadas por el BDSM son variadas y admiten gran cantidad de manifestaciones diferentes.

  Como práctica erótica el BDSM se apoya siempre en el consenso de los participantes y se distingue radicalmente del sadismo criminal.

  La comunidad internacional vinculada al BDSM viene poniendo especial énfasis en que las prácticas sean SSC, es decir, Safe, Sane and Consensual (seguro, sensato y consensuado)
  • Seguras, en cuanto al conocimiento necesario sobre su desarrollo y sobre el material usado, así como sobre la prevención de riesgos.
  • Sensatas, en cuanto a la capacidad razonable de decisión por parte de los actores, no alterada por drogas o bebidas y acorde con la experiencia de cada participante, sabiendo diferenciar fantasía y realidad.
  • Consensuadas, en cuanto a que los participantes estén de acuerdo sobre la forma e intensidad con la que se realicen, e igualmente que dicho acuerdo pueda rescindirse en cualquier momento.
  Rack es el acrónimo de Risk Aware Consensual Kink, que viene siendo traducido en la comunidad hispanoparlante como riesgo asumido y consensuado para prácticas de sexualidad alternativa (o no convencional): racsa. El racsa pone los acentos en la responsabilidad propia de los participantes en una actividad BDSM, responsabilidad informada y consensuada para evaluar y asumir los riesgos de dicha actividad.

  Como podemos leer, las diferencias son muy claras, o por lo menos, para mí lo son.
  
  La violencia es ejercida por personas que no saben controlarse, que su objetivo es dañar sin importar la magnitud, que una de las partes es forzada  a someterse a las acciones de la otra persona y en muchos casos sin poder detener la escena.

  Mientras que en el BDSM, lo primero que he aprendido es que tanto Dominantes como sumisos deben tener algo imprescindible: control.
   
  Me fascina una frase que mi Amo-Tutor menciona en su texto 100 DUDAS DE UNA APRENDIZ DE SUMISA (http://elfarosm.blogspot.mx/2013/02/100-dudas-de-una-aprendiz-de-sumisa_25.html duda 79)  en donde cita: “Antes de Dominar a nadie, la primera persona a la que un Amo debe Dominar es a sí mismo.”  
  
  Creo que por la parte sumisa corresponde lo mismo, control en nuestros pensamientos, deseos, palabras, acciones, emociones. Una relación involucra todos estos aspectos y lo que buscamos es satisfacción y no sólo en el ámbito sexual, también en el personal y en el emocional.
  
La violencia limita el potencial de las personas, mientras que en el BDSM buscamos la superación por medio de la entrega voluntaria de nuestro ser, es decir, tu Amo o Dominante siempre estará al pendiente de ti, de tus reacciones, de tus pensamientos, de tus logros y de tus fallos, buscará la forma de que te sientas segura y con la confianza suficiente para que le permitas apoyarte a crecer en los ámbitos en los que previamente han pactado, el BDSM no es solamente sexual, encontrando un buen Amo te ayudará a superarte en los ámbitos que tú le permitas, inclusive laboral o familiarmente; la violencia difícilmente acarrea consecuencias positivas.

  Las sesiones de D/s pueden detenerse en el momento en que una de las partes sienta o crea que se puede salir de control, en el momento en que ya no te sientes segura, en el momento en que te han lastimado más de lo que podías tolerar, es cierto que no todo es miel sobre hojuelas, pero nosotros podemos detenerlo, en nuestro ámbito recurrimos a lo que llamamos palabra de seguridad, que es una palabra que con tan sólo decirla basta para que lo que se esté haciendo en ese momento cese, la pacta cada pareja (rojo, stop, pirul, tango, una palabra que ambos recuerden y que no deje lugar a dudas de que lo que se desea es detener lo que está sucediendo). En una relación violenta o abusiva eso no ocurre, el agresor seguirá con su cometido hasta que quede satisfecho o haya causado un daño que no había previsto.

  ¿Qué diferencia hay entre BDSM y sadomasoquismo enfermizo? Una simple palabra: CONSENSUADO. Así es, puede haber muchos masoquista y sádicos que van provocando situaciones para lograr satisfacer este gusto, pero nosotros lo pactamos, sabemos y establecemos los parámetros de la relación, decidimos cómo y por qué, no vamos provocando a nuestra pareja sin que ella sepa lo que deseamos.

  Si no nos sentimos a gusto con una práctica, sólo es suficiente expresarlo para que no se vuelva a hacer y tenemos claro que nuestras prácticas conllevan un riesgo, el cual o aceptamos o declinamos. La persona violenta no mide consecuencias ni propias ni ajenas, se pierde en su ira y en sus emociones y las consecuencias pueden ser graves.

  Ahora bien, después de leer algunas otras definiciones de sadomasoquismo y de sadismo creo que el término está mal empleado, ya que la mayoría de los autores hace clara referencia a la excitación sexual por el empleo del dolor o la humillación, sin embargo, usamos el término para referirnos a las acciones que son en extremo crueles o violentas y a las personas que las ejercen como sádicos y muchas veces estas personas al realizar dichos actos no experimentan una satisfacción o excitación sexual, es por eso que me permití incluir el término trastorno de la personalidad antisocial, que en mi particular punto de vista se acerca más a la definición de lo que hoy en día denominamos  sádico.

  No soy psicóloga ni tengo un conocimiento amplio del tema, ni pretendo que lo que escribo sea tomado como ley, en el encabezado de mi blog expreso que lo que escribo es únicamente mi muy particular y humilde punto de vista, son mis experiencias, mis dudas y algunas fantasías.

  Sobre el tema hay mucho que decir, ojalá me compartan sus puntos de vista, experiencias, opiniones o conocimientos, que siempre son enriquecedores para cualquier persona.

Un cordial saludo.
natalia.


domingo, 12 de octubre de 2014

¿QUÉ ES PARA MÍ BDSM?


  Es un estilo de vida, sí, y no lo digo por parecer interesante o popular, es y ha sido eso siempre en mí, porque desde que tengo uso de razón mis tendencias me han acompañado desde siempre.

  El BDSM ha sido en cierta parte como un diccionario que me ha ayudado a poner nombre a lo que sentía y aún no sabía cómo se llamaba: sumisión.
  Ya que el término masoquismo lo aprendí antes, pero me faltaba ponerle nombre a esa parte que deseaba verse sometida, rendida ante alguien que me infundiera respeto y al adentrarme en este mundo, en esta cultura he aprendido que soy una sumisa masoquista, con tendencias dominantes pero que sabe cuándo ser una y cuándo otra.
  El primer recuerdo de deseo de sumisión que tengo, como ya lo dije en una publicación anterior, fue cuando pedí que me enviaran a un internado militar a seguir órdenes para obedecer, pero nunca se pudo, el segundo “contacto” y aunque apenas puedo comprenderlo así, fue cuando leí “El Conde de Montecristo” y me cautivó ese personaje llamado Haydé, para mí, el mejor de todos, no Edmundo y mucho menos Mercedes, fue Haydé quien me conmovió, quien me inspiró esa admiración al renunciar a su libertad por seguir a Edmundo, me enamoré de ese concepto de entrega total, devota, agradecida, creo que es la única ocasión que el concepto de esclavitud voluntaria me ha parecido hermoso.
  Para mí, mis tendencias no han sido imitadas, han nacido conmigo pero sin poder explicarlas claramente porque cómo explicas que alguien con carácter fuerte, con don de mando, que consigue lo que quiere, desee verse así, flagelada, arrodillada, sometida, callada…… sumisa. Ahora veo que no soy la única con estas características, que como yo hay sumisos, dominantes, sádicos y masoquistas y sí, éstas dos últimas palabras suenan muy fuertes: sadismo y masoquismo porque a nuestra mente viene  imágenes perturbadoras para describirlas pero que una vez que comprendemos los conceptos nos damos cuenta que no tiene que ser tan abrumadoras ya que no todo es tan extremo, hay formas y niveles de intensidad y no todo es tan cruel como se lo imaginan.
  Como bien me dice un profesor: “La sexualidad y el dolor se educan”, yo no sé si mi umbral del dolor es alto o bajo, sólo sé que me gusta sentirlo, muchas veces ver cómo se inflige y otras tantas provocarlo.
  Ahora sé que todo tiene un nombre, que todos esos deseos o fantasías tienen un nombre: bondage, cutting, spanking, sumisión, privación sensorial, momificación, humillación…. Entre otros tantos que he ido descubriendo y que me llaman la atención.
  Tal vez, de haberme adentrado antes en este mundo, mi vida sería más equilibrada pues no habría pasado tanto tiempo retando a medio mundo para que me sometiera ya que me he dado cuenta que mucho de ese carácter combativo es reflejo de un deseo de ser controlada. Como me dijo un amigo que conocí en este medio: No andaría como trompo dando tumbos por todas partes, sin control. Es decir, habría podido ser sumisa aquí y controlar mejor allá ¿cómo lo sé? Porque a través de mi experiencia con mi Amo-Tutor he podido ir equilibrando el puente entre mi ser y mi ser vainilla, he ido aprendiendo un poco de dominio sobre mí, sobre mis pensamientos, sentimientos, lenguaje, acciones, en fin, control y eso me ha llevado a un crecimiento en todos los ámbitos.
  Aclaro, no es un medio de escape, es ser lo que soy en el lugar y momento correctos, es entender que ni estoy sola, ni estoy enferma y ni soy única en este aspecto. Entiendo que el BDSM es mi manera de expresar tanto parte de mi personalidad como mi sexualidad, porque no es lo mismo recibir un azote o una humillación en una sesión a que esa misma persona lo hiciera fuera de ella, mi reacción no sería la misma, no se trata de recibir golpes o insultos ni en cualquier momento, ni en cualquier lugar y mucho menos de cualquier persona, es establecer todos esos parámetros y disfrutarlos con mi pareja, pero en ningún momento debe de ser sinónimo de abuso.
  Hay quienes lo ven como un juego de roles, otros lo vemos como estilo de vida, cada quien determina lo que es para ellos y sí, es cierto que hay muchas reglas, protocolos y normas que existen dentro del BDSM , pero como en todo, cada quien decide cómo llevarlo, lo que nunca deberíamos olvidar es el SSC, porque si a mi pareja se le olvida es nuestra integridad la que está en juego, ser sumisa no es sinónimo de ser inconsciente, ni tonta, ni arriesgarse ciegamente, de ser negligente, nadie mejor para conocernos que nosotros mismos.
  El SSC se aplica desde el momento en que estás buscando tu contraparte, puedes tener muchas fantasías, pero sólo son eso, poco a poco irás avanzando, superando algunos límites y marcando otros, cuando me adentro en este mundo recuerdo una frase que me decía un profesor: “Tranquila, camina, no corras, puede que te caigas, te lastimes y entonces ya no quieras ni andar”.
  Así que es otra forma de explicarlo, un camino de autoconocimiento, donde me siento más libre, más fuerte, más centrada.
  Conforme te adentres en él lo verás de distintas maneras a la mía, yo sólo te comparto mi opinión.
 Abre poco a poco la puerta, ve disfrutando y seleccionando lo que te gusta, hay muchas formas de existir en este mundo, pero eso sólo tú lo eliges.

Suerte y que todo salga bien.
natalia.





domingo, 5 de octubre de 2014

MI PRIMERA SESIÓN.



 Me gustaría decir que mi primera sesión fue idílica y perfecta, pero no, la mía, fue una primera sesión real, con algunos contratiempos y con situaciones que no imaginé que me sucederían.

  Para empezar fue muy particular debido a la distancia entre mi Amo -Tutor y yo, él en España y yo en México, por lo que decidimos fuera virtual, por medio de la cámara de nuestras computadoras, pasaron varios meses desde que su dominio empezó sobre mí para poder llevarla a cabo, cuando no se cancelaba por una cosa se cancelaba por otra, en fin, que ése día tan anhelado por mí, llegó, después de hacer mis compras necesarias para llevarla a cabo y de organizar muy bien mi día tenía ya todo dispuesto.

  Mientras caminaba a la escuela de mi hijo para dejarlo en ella, sentía a cada paso esa mezcla perfecta de nervios y excitación, había fantaseado muchas veces con las sesiones, pero nunca con la primera, pasaban muchas cosas por mi cabeza e intentaba poner atención a la plática con mi hijo y que esos pensamientos no me distrajeran. En fin, lo dejé en la escuela y me dirigí al hotel, jamás en mi vida había estado en un hotel para otra cosa que no fuera hospedarme por motivos de vacaciones, así que también fue una experiencia nueva, pedí una villa, para mí sería más íntimo y no me sentiría tan expuesta como en una habitación de hotel, me llevaron a ella y cerraron la puerta de la cochera, empecé por cambiarme de ropa, de jeans a minifalda, de blusa a corset, me puse los ligueros con las medias y no creí que me costara tanto trabajo sujetarlas y me puso a pensar en cómo me las quitaría después sin verme tan torpe, de zapatos bajos a zapatillas con un tacón inmenso que tanto me gustan, al abrocharlos, no sé si fueron los nervios rompí la correa con los que debía sujetarlos y pensé que eso no estaba bien, prendí la computadora y me di cuenta que había olvidado pedir la contraseña para la conexión a internet, así que quise salir a la recepción para pedirla pero no sabía cómo salir pues la puerta estaba cerrada y no encontré la forma de abrirla, quise comunicarme desde la habitación y no acertaba con la extensión, así que llamé desde el celular y la señorita muy amable me dio la extensión de la recepción para comunicarme desde la habitación, me dio la contraseña y seguí con mis preparativos.

  Conforme el tiempo pasaba yo me ponía más nerviosa, cada vez faltaba menos tiempo para entregarme a mi Amo por primera vez y pensaba en lo difícil que sería ponerme de rodillas, bajar la mirada, endulzar mi tono de voz, pues en mi vida diaria soy muchas cosas pero no sumisa, el reloj marcó la hora establecida entre ambos para conectarnos, por la señal de Skype leí que ya estaba conectado.
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             AMO, estoy lista- escribí.
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       Yo también- contestó él.
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       Ok, guíeme por favor Amo.
-          
       Es la sumisa la que llama al Amo.
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       Discúlpeme Amo.- le dije y marqué.

Al contestarme y oír su voz todo empezó a cambiar, mis nervios aumentaban pero el escucharlo me empezaba a calmar...
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       Buenas tardes Amo.
-          
       Buenos días Natalia.

  Entonces me empezó por explicar algunas situaciones básicas en las sesiones, la sumisa siempre está atenta al Amo, es ella quien sirve, quien atiende, quien acerca, está para servir, para complacer, todo lo contrario a la vida diaria, ¿quiere agua? Yo la sirvo, ¿se sentará? Ofrezco el asiento, estoy por él y para él, nada más. La sumisa espera siempre al Amo, nunca al revés, la posición de espera es de rodillas, con las piernas separadas, la cabeza baja, las manos sobre las piernas con las palmas hacia arriba y abiertas, mi Amo se preocupa por mí y me pide que coloque una toalla en el piso y adopte la posición que me ha dicho. El momento empezaba, me sentía tan segura que al caminar por la toalla ya había olvidado que una de mis zapatillas no estaba bien sujeta y al caminar lo recordé, pero no quería que mi Amo me viera torpe, así que procuré caminar despacio y provocadoramente, regresé e hice lo que me ordenó, estar de rodillas fue el primero de mis obstáculos que libré, y al dirigirme a él siempre sería con un : Sí mi Amo, dulce y tranquilo, me hizo decirlo varias veces hasta que logré el tono deseado, ya de rodillas en posición de espera me llevó poco a poco a interiorizarme más en mi lugar, en ser sumisa, su voz me fue guiando y calmando poco a poco hasta que logré estar en total calma, lo siguiente fue más complicado:
-        
             Ponte de pie y desnúdate.

Me levanté, coloqué la computadora en otro lugar para que pudiera observarme mejor, procuré no verlo para no ponerme más nerviosa, me habría encantado poder ver su rostro al verme tan obediente. 

Me empecé a quitar la ropa, poco a poco, le hablaba para estar segura que seguía conmigo, y en un momento la conexión se perdió. Me dio un poco de nervios pues estaba tan concentrada en lo mío que me perdí por un momento, volví a marcar y se restableció la comunicación………. no voy a relatar mucho más, porque para mí, lo que siguió fue tan íntimo, tan personal, que deseo conservarlo para mí, que baste con decir que ofrendé mi dolor, le entregué mi obediencia, me dejé llevar por él poco a poco, por momentos tan sutil y en otros tantos tan intenso.

 Diré que la sesión no se terminó por cámara sino por teléfono porque la señal no lo permitió, que yo quedé extasiada, feliz y con una sonrisa en mi rostro que dudo mucho alguien pueda poner otra igual, que a pesar de la distancia sentí a mi Amo como lo que es, mi dueño, mi Señor, mi Amo, que cada vez que me decía toma el látigo y úsalo era para mí como recibir un beso de sus labios, ¿dolor? Lo necesario para una masoquista como yo, las pinzas, el látigo, el chocolate, su voz, mi cuerpo, mi obediencia, su Dominio, mmmmmmm, excelente combinación que me hacen desearlo otra vez.

  No se necesita más que de un buen Amo y ser obediente para ser llevada a esos límites de placer tan esperados, se necesita de mucho, para que aún con esa distancia quiera pedir, rogar y suplicar por otra sesión.

  Sé que jamás tendré otra igual y que cada una me marcará de distinta manera, pero yo quería compartirles mi experiencia porque no sólo me ha parecido hermosa, sino hasta graciosa por todos los contratiempos que tuvimos que pasar, y con ellos sólo reafirmé lo que ya sabía: que le importo a mi Amo, que es decidido, que es dedicado, porque de lo contrario ¿me habría llamado desde España sólo por sesionar conmigo? ¿Habría terminado la sesión después de tantas veces que perdimos la conexión de internet? Yo sé que tal vez otro lo hubiera dejado así, pero no mi Amo y eso se lo agradezco infinitamente.

  Ojalá que si tú que lees ahora esto, te decides a dejarte llevar, tu primera sesión sea igual y si se puede mejor que la mía, es sólo cuestión de saber elegir a un buen Amo.

  Si decides emprender el camino, mucha suerte y ojalá te valla tan bien como a mí hasta el momento.

  Y ojalá también me compartas ese momento que es tan especial.

  Con cariño.
Natalia.



domingo, 28 de septiembre de 2014

RELATO: POR UN CAFÉ.

POR UN CAFÉ.

Me encuentro dormida boca abajo, con las manos juntas atadas a la cabecera de la cama cuando siento su boca recorriendo mis piernas, siento su lengua recorrer mis muslos lentamente, estoy casi desnuda, solo llevo mis diminutos calzoncitos de encaje y empiezo a dejarme llevar por la sensación tan deliciosa que mi cuerpo empieza a recibir, entonces recuerdo por qué estoy atada.....

  Ayer salimos, decidimos ir a comer en un restaurante cercano a casa, todo iba bien hasta que mi Amo me llamó por otro nombre y no me habría afectado tanto si hubiera sido otro nombre, pero me llamó como la zorra con la que me he enfrentado los últimos días y que no deja de molestar, mi reacción no fue buena, no le dije nada, simplemente ordené un café frappé, sí, un simple café me ha metido en este lío, hace unos días el médico me lo prohibió por cuestiones de salud y al no acatar la orden del médico, la ha dado mi Amo.

- Te he prohibido el café, ¿recuerdas?- Me dice severamente acercándose a mí sin dejar de mirarme a los ojos.

- No, se lo ha prohibido a Natalia, no a la zorra de Fernanda que es como me ha llamado.- Contesto con una seguridad y molestia más que evidentes.

- Cancela el café- Me dice al momento en que llega el mesero con mi vaso enorme de café.

 Por respuesta le doy un sorbo, el sabor me es delicioso después de tanto tiempo sin probarlo, tomo con la pajilla un poco de la crema batida y chupo la orilla lentamente sugiriendo algo más, en sus ojos se enciende una chispa, pero no descifro qué es, si placer o coraje y en ese momento sólo me dejo llevar por el placer del ansiado líquido en mi boca, lo disfruto lentamente y mi Amo no dice más, sólo me observa.

 Comemos, la plática transcurre plácidamente y nos retiramos después de pagar la cuenta, disfrutamos de lo que queda de tarde, regresamos a casa casi al anochecer.

  - Me voy a dar un baño y cuando regrese quiero ver a mi perra en su lugar ¿entendido?

- Sí Amo- contesto, él se va, sé que tardará un poco así que preparo su ropa, me la llevo a la nariz y me embriago de su aroma. Cuando escucho que el agua ha dejado de caer me retiro a mi lugar, solo me he dejado mis calzoncitos de encaje, me coloco en posición y lo espero.

Llega tranquilo a la habitación, se sienta en la cama.

- Hoy me has desafiado, has desobedecido y sabes que tendrás un castigo, ven aquí.

  Se me hace un nudo en el estómago y no acierto a obedecer.

 -Ven aquí- repite en tono más enérgico.

- Mi Amo me ha llamado con otro nombre- digo en un tono que no he medido  Y que en vez de ayudarme me meterá en más problemas, pero ya es tarde para hacerse para atrás.- Eso no estuvo bien y me hizo sentir mal.

 Mi Amo se pone de pie y camina hacia mí, yo también me pongo de pie sin que él me lo pida pero en vez de acercarme me alejo.

- No lo hagas más difícil ni más severo. Ven ahora mismo.

-No- le espeto con arrogancia, pero ahora tengo miedo, sé que ya me he extralimitado y que la paciencia de mi Amo se terminó, intento nuevamente escapar cuando él se acerca pero me toma del brazo y me coloca frente a él, lo miro a los ojos con soberbia y por respuesta tengo dos bofetones que me hacen bajar de inmediato la mirada.

-Te he llamado tres veces y no has obedecido, tendré que educarte otra vez.- Me toma del cabello y prácticamente me arrastra por la habitación, me debato intentando soltarme pero es inútil, a mi Amo le complico más las cosas.

-¿Tienes ganas de lucha?,- toma las esposas de cuero que me dejan las manos muy juntas y usando su fuerza me las coloca, me toma nuevamente del cabello y me arrastra hasta la cama, de donde toma la cadena y sujeta las esposas a ella, la recorre de tal manera que quedo tumbada boca abajo y no me puedo mover. -Te quedarás aquí, sola hasta que te calmes y más te vale que no note tu presencia, estoy muy disgustado contigo, espero que hayas disfrutado mucho tu café.- Me da un par de nalgadas muy fuertes y me deja sola.

  No sé qué hora es, ni cuánto tiempo ha pasado desde que Me dejó, pero me despiertan sus labios, la sensación es exquisita, con su boca, empieza a quitarme la única prenda que llevo puesta. Mis sentimientos son encontrados, estoy excitada, pero tengo miedo.

- Ya estás más tranquila, yo también y ahora te daré el castigo que mereces.- Se coloca debajo de mí y me coloca en una posición que conozco bien, me acaricia el trasero y después me azota, primero a izquierda y a derecha, los golpes son fuertes, uno tras otro y no puedo interponer mis manos pues las tengo atadas, no sé cuántos lleva pero ya no tolero la piel, de repente se detiene, me acaricia nuevamente el trasero, ahora dolorido, desciende cada vez un poco más y de repente introduce sus dedos en mi sexo, lo acaricia, qué sensación, el ardor de la piel se me empieza a olvidar cuando sus dedos entran y salen de mí. Estoy muy excitada y creo que no tardaré en tener un orgasmo, pero mi Amo se detiene, retira sus dedos de mi interior y continúa azotándome. La frustración y el dolor se hacen presentes, lo necesito dentro de mí. 

 Se pone de pie, afloja un poco la cadena, me toma de las pierna y me hace bajar de la cama, de tal manera que mi torso queda sobre ella y las piernas en el suelo, me ata cada pierna a las patas de la cama, ahora mis movimientos son más limitados, se coloca detrás de mí y siento la caricia en mi trasero de las tiras de cuero, no sé cuántas son, pero sé que es uno de los látigos, recibo varios azotes más, sé que mi piel arde demasiado, el sonido de las tiras y la fuerza con la que soy azotada causan un efecto de total sumisión.

- Amo, lo siento, por favor pare.- Le digo con un poco de aliento.

- Demasiado tarde, eso era ayer, pero me has desobedecido, has tomado café, me has hecho ir por ti, has luchado contra mí, me has hablado insolentemente. Ahora recibe el castigo que sabes bien que mereces.- Me deja un minuto y después siento la fusta recorrer mis ya adoloridas nalgas, sé que eso va a doler más que todo lo anterior, con la fusta recorre mi sexo y lo lleva arriba y abajo, me excita nuevamente, recorre con sus manos mi cuerpo, me vuelve a introducir sus dedos y con la otra mano me acaricia el trasero, la espalda, las piernas, mis senos, los retuerce y gimo de placer, me hace llegar a las puertas del orgasmo para cerrarlas en mi nariz otra vez y no sé qué es más tortuoso, si los azotes o el no poder desahogar tanto placer.

- Ahora te voy a dar 15 azotes con la fusta, los contarás en voz alta y repetirás en cada uno de ellos " No volveré a beber café pues mi Amo me lo ha ordenado para preservar mi salud. Gracias Amo por preocuparse de mi bienestar". Después te usaré a mi antojo y pasarán tres días hasta que te vuelva a tocar, en esos tres días tendrás que volver a ganarte mi confianza pues con tus actitudes me has decepcionado, no tocaré tu cadena y te arrastrarás por el piso como la perra que eres, ¿has entendido?.

- sí Amo-

- Antes de comenzar dime lo que repetirás después de cada azote.

- No volveré a beber café pues mi Amo me lo ha ordenado para preservar mi salud. Gracias amo por preocuparse de mi bienestar.

- Muy bien.-  Comenzó el castigo, el dolor no me permitía recordar la frase adecuadamente, pero hacía lo posible, comencé a sudar por el dolor y las palabras cada vez me salían más entrecortadas. Terminados los azotes, mi Amo me tomó  con fuerza, pero nuevamente solo él pudo complacerse.

- Te dejaré las manos atadas para que no puedas tocarte, no mereces recibir placer, pues tus acciones no me lo han proporcionado. Ahora contesta ¿quién eres?

- Soy quien mi Amo desea que sea.

-¿Qué eres?

- Soy lo que mi Amo desea que sea, su silla, su mesa, lo que le de placer, su estatua, su perchero, su perra, su puta.

- Espero que tu actitud no vuelva a repetirse.- y me coloca la cadena, une las esposas a la argolla del collar, lo que mantiene mis manos alejadas de mi cuerpo y de mi sexo, pues aún tengo ganas de satisfacerme a pesar del dolor.

  Es el segundo día de castigo y en verdad no creo tolerarlo más, es cierto que mi Amo no me toca, pero me ordena tocarme, me acaricio y me disfruto, pero cuando estoy por llegar al clímax mi Amo me ordena detenerme y me ata nuevamente las manos.

  Este castigo me lo he ganado y el afrontarlo me es muy difícil,  sé que para mí Amo tampoco es fácil, pues a pesar de que le ofrendo mi dolor y mi frustración lo he ofendido, desearía poder brindarle el placer que merece, con mis manos, con mi cuerpo, con mi boca, pero ahora no soy digna de ser usada por él, tendré que enmendar mi falta y me esmeraré. Sé que al terminar mi castigo  mi Amo usará mi cuerpo y no sé si esta vez me permita llegar a mi orgasmo, pero eso no me importa, deseo que al perderse en mi cuerpo perdone mis faltas, disfrute de mí y me haga sentir nuevamente su puta.


Pensando en mi AMO -TUTOR.
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